Leo las obsesiones de El Español (no las copio completas, búsquelas en el enlace) y:
1 – España y las Españas
España es la morada vital de los españoles. Es también la entidad histórica y política que garantiza los derechos y libertades de todos los ciudadanos, la solidaridad entre sus habitantes y el anclaje con la Unión Europea. Tenemos mucho de lo que enorgullecernos y unas cuantas cosas de las que avergonzarnos. Más allá de las ideologías, debemos impulsar un patriotismo transversal basado en los valores constitucionales …
España es un ficción. Su vida solo debería depender de su utilidad (una palabra que no leo). Lo demás es blablabla.
2 – Otra Ley Electoral
Seguimos teniendo la ley electoral improvisada en 1977 cuando ni siquiera se había redactado la Constitución. Es una norma que castiga a las minorías y sobre todo deja el control de diputados y senadores en manos de las cúpulas de sus partidos. Este mandato imperativo de facto es uno de los mayores cánceres de nuestra democracia …
Bullshit.
3 – Separar al Ejecutivo del Legislativo
No hay democracia auténtica sin una división real de los poderes del Estado. Planteamos avanzar hacia un régimen presidencialista que establezca una separación entre el Gobierno y el Parlamento…
4 – Jueces independientes Es imprescindible impulsar y proteger la independencia de los jueces frente a las injerencias del poder político…
Una nueva muestra de adoración por lo simple. ¿Por qué han de ser los jueces -personas no elegidas por el pueblo- los que escojan su órgano de gobierno? ¿Por qué ha de ser el parlamento quien escoja al fiscal general si la división de poderes implica la existencia de un ejecutivo directamente elegido por el pueblo y por qué ese fiscal será más independiente? Es maravillosa la creencia en el poder tautmatúrgico del papel.
5 – Democratizar los partidos
Los partidos están controlados por sus cúpulas, elegidas de forma endogámica e incluso dedocrática. Hay que desarrollar el artículo 6 de la Constitución que establece que su “estructura y funcionamiento interno deberán ser democráticos”.
Sí. Aunque ya podían explicar cómo.
6 – Combatir la corrupción
La corrupción encuentra el campo abonado allí donde hay opacidad. La sociedad tiene que poder examinar la gestión de los servidores públicos y debe poder acceder de forma sencilla a cualquier información relevante. Las leyes de transparencia han de hacer justicia a su nombre y transformar los muros de la Administración en paredes de cristal.
Hagiografía del incorruptible funcionario «de carrera» y de los «procedimientos», como si ya no existiesen en nuestras leyes trabas y exigencias. Loa al ciudadano que ha perdido la confianza y ni una sola crítica de la tolerancia civil de la corrupción, fuente de tantos males.
7 – Adelgazar la Administración
Los gobernantes han creado un aparato elefantiásico pensando más en intereses políticos que en el servicio a los ciudadanos. El resultado es una Administración cara, sobredimensionada e ineficiente.
La cuota liberal. Hay que hacer cosas, pero hay que hacerlas con menos administración. El mal es malo y el bien es bueno. Seamos justos y benéficos. La nada, en suma, sin la carta de despido y el finiquito concretos.
8 – Bajar los impuestos
Aunque la presión fiscal en España apenas llegue al 33% y sea una de las más bajas de la OCDE, la dimensión de la economía sumergida y el fraude a altos niveles hacen que el peso de la recaudación se concentre en el IRPF y el IVA…
Qué pereza. La carga fiscal es poca, pero hay que bajar los impuestos (sobre todo a los que tributan por IRPF y publican libros) y combatir el fraude, pero eso sí, adelgazando la administración, que lo dicen en el punto anterior. Tanta grandilocuencia para luego demostrar que la obsesión se limita a la tabla del IRPF y a un artículo de la ley del IVA.
9 – Menos multas de tráfico
La Administración ha encontrado en las multas de tráfico -tanto en vías urbanas como en carretera- una vía fácil para obtener ingresos. La mayoría de infracciones sancionadas, con cámaras, radares y controles estratégicamente situados, no suponen peligro alguno para el conductor ni para el resto de automovilistas. Lo que se persigue no es la seguridad vial sino, descaradamente, la recaudación…
Inane.
10 – Mejor enseñanza con más inglés
España viene invirtiendo ingentes cantidades de dinero público en la enseñanza sin que ello se traduzca en una mejora de su calidad. Hay que reestructurar el sistema, garantizando la escolaridad temprana, de 0 a 3 años, moldeando la secundaria según las aptitudes de los alumnos y rompiendo la endogamia de las universidades para que sean viveros de talento y cualificación profesional…
Tras adelgazar la administración y bajar los impuestos, hemos de garantizar la escolarización a los niños de 0 a 3 años y luego moldear y romper la endogamia y enseñar inglés. Lo único concreto es lo del inglés. Lo demás es otro seamos justos y benéficos.
11 – Libertad en la lengua vehicular
En algunos lugares de España las lenguas han dejado de ser un instrumento de comunicación de las personas y se han convertido en una herramienta política…
Vale.
12 – Reducir el paro juvenil
Un país que quiere mirar el futuro con confianza no puede tener a la mitad de sus jóvenes en paro. Cada vez que se forme Gobierno el nuevo equipo debería presentar un plan de choque contra esta lacra en el plazo de cien días…
Lo de los cien días, ah, lo de los cien días. Los liberales jugando a los diez millones de toneladas de azúcar y a los planes quinquenales. Puro voluntarismo. El contrato único, quién sabe. Quizás sí, quizás no. Como mayoritario en vez de proporcional o D’Hondt en vez de Hare. Ventajas, inconvenientes. Por cierto: ¿incentivar algo? ¿quién controla el fraude si adelgazamos la administración?
13 – Igualdad salarial para la mujer
Según un informe de la UE la brecha salarial entre hombres y mujeres en España es del 19,3%, cuando la media de la zona euro está en el 16,6%. Ello obedece tanto a la discriminación directa -igual trabajo, menor salario- como al tipo de empleos que se conceden a las mujeres…
Toca intervencionismo esta vez y diagnóstico simplón de una realidad manifiestamente compleja. Por cierto, ¿que se conceden?
14 – Apoyar a los emprendedores
Ser emprendedor sigue siendo hoy en España una carrera de obstáculos: lejos de encontrar facilidades todo son trabas y trámites burocráticos que se eternizan en los despachos…
15 – Igualdad sanitaria con muerte digna
Todos los ciudadanos españoles deben tener derecho a las mismas prestaciones públicas, independientemente del territorio en el que residan. Además, un paciente nunca tendría que estar desprotegido en una comunidad autónoma que no sea la suya. Hay que implantar una sola tarjeta sanitaria en todo el país…
Sí.
16 – Más Europa
España tiene que situarse en la vanguardia de quienes apuestan por dar un nuevo impulso a la Unión Europea. Sólo unidos, los europeos podrán recuperar su posición estratégica y tener voz y protagonismo en el nuevo orden mundial que se está configurando…
Sí, claro. Pero se hará, como sabe cualquiera con dos dedos de frente, aumentando su burocracia, no disminuyéndola.
17 – Las víctimas del terrorismo
La memoria y el respeto hacia quienes han sufrido esa barbarie no puede languidecer por el hecho de que hayan remitido el secuestro y el tiro en la nuca. Las monstruosidades que ETA y otros grupos terroristas han cometido en España y el sacrificio de sus víctimas no pueden ser amortizadas por la tendencia a vivir sólo el presente.
Un indecente tótum revolútum.
18 – Evitar la muerte de inmigrantes
La tragedia que supone que miles de desesperados mueran cada año intentando alcanzar el Primer Mundo no puede sernos ajena. España, por su situación geográfica, conoce bien el problema. Es un asunto que hay que abordar con realismo: es imposible acoger a todas las personas que están dispuestas a abandonar sus países.
Evitar la muerte de inmigrantes básicamente haciendo lo que ya se hace. Eso sí, sin subir impuestos y adelgazando la administración. Un título que nada tiene que ver con un contenido.
19 – Proteger el bosque, repartir el agua
Conservar la naturaleza y aprovechar bien sus recursos son las dos caras de una misma moneda. Recuperar masa forestal debe ser una prioridad en un país como España, en grave riesgo de desertización. Salvar el bosque es preservar la riqueza de nuestra biodiversidad, la flora y la fauna. De la misma forma, hay que actuar en el mar, restringiendo zonas a la pesca, para que nuestras aguas no acaben esquilmadas…
El peaje ecologista (recuperemos la masa forestal bajando impuestos) y ¿bromea o qué?
20 – El coche eléctrico
El progresivo deterioro del medio ambiente es inquietante en todo el mundo y se ha agravado como consecuencia del calentamiento global. España tiene que ser ejemplar en la reducción de emisiones y en el ahorro energético. El coche eléctrico es una opción realista…
Fomentemos la implantación del coche eléctrico rebajando impuestos. Otra de renovables.
21 – Internet para todos, internet neutral
En la era de la comunicación hay que mejorar la conectividad invirtiendo en infraestructuras. Las autoridades deben hacer un esfuerzo facilitador para que la oferta de conectividad sea adecuada en cobertura y ancho de banda en todos los espacios, de manera que sea una herramienta verdaderamente útil y al alcance de los ciudadanos.
Inversión ¿de quién? Por lo demás, ¿no discriminación aunque haya quién pague para tener mejor tratamiento? ¿Quieren nacionalizar internet?
22 – Libertad en la televisión
Los políticos deben dejar de contemplar la televisión como un instrumento de propaganda a su servicio. Hay que cerrar todas las televisiones públicas que supongan un agujero para el erario.
Normal que un medio privado quiera que se cierren todas las televisiones públicas (porque se cerrarán todas ya que todas son deficitarias). Lo que no entiendo es por qué no incluye las radios y los periódicos. Y el Instituto Cervantes. Y la Agencia Estatal de Meteorología y el INE. Así, a bote pronto.
23 – El ojo de halcón en el fútbol
La tecnología se ha introducido en el deporte para hacer justicia en los lances controvertidos que pueden ser decisivos para el resultado de un encuentro. El baloncesto o el tenis son dos buenos ejemplos…
¿En serio? Pero ¿por ley? ¿con la pasta que nos ahorraremos al cerrar RTVE?
24 – Contra la mala educación
En España se grita en lugares públicos, se insulta en los lances de tráfico, se silban los himnos, se circula con motocicletas ruidosas a horas intempestivas, se aparca por sistema en doble fila, se dejan los excrementos de los perros en las calles, parques y jardines, se escupe en el empedrado, se arrojan cáscaras de crustáceos al suelo de los bares, se olvida usar el desodorante incluso en plena canícula, se tutea a cualquier desconocido, se injuria y blasfema en los recintos deportivos.
¿Somos diferentes? Quizás en algo: en vernos siempre como diferentes. En fin, pretender mejorar nuestro civismo es siempre loable, pero incluir el uso del desodorante como obsesión de un medio que nace resulta pintoresco.
25 – La Ñ
El español es la lengua que nos abre las puertas de un continente entero y nos proyecta al mundo, donde lo hablan más de 500 millones de personas. La ñ es un símbolo de su riqueza en la medida en que representa con una sola letra un fonema para el que otros idiomas necesitan dos.
Salvemos la ñ. Un nuevo bandazo intervencionista del simplismo ciclotímico tan evidente en estos veinticinco puntos.
25 obsesiones que recuerdan a cualquier programa electoral. Un ejemplo más de vagancia intelectual, mezclada con mercadotecnia.